Las lesiones no intencionadas constituyen la primera causa de muerte en la infancia entre los 5 y 18 años de edad en la Unión Europea. En España, las causas más frecuentes de lesion accidental son las caídas y precipitaciones (35,6%), seguidas de los accidentes de tráfico (23,7%), bien por atropello en los niños de 4 a 8 años o como ocupantes de automóviles o motos en los adolescentes.
Los niños en edad preescolar son víctimas frecuentes de accidentes domésticos, caídas, precipitaciones desde altura, ahogamientos, quemaduras e intoxicaciones. Las lesiones no intencionadas son también la principal causa de dolor, sufrimiento y discapacidad que, a lo largo de la vida, pueden tener consecuencias graves sobre el desarrollo físico, psíquico y social del niño lesionado.
La guía para padres sobre la prevención de lesiones no intencionadas en niños, que acaba de ser publicada, ha sido elaborada con el objetivo de ayudar a los padres y cuidadores de los niños a prevenir los accidentes.
Esta obra ha sido confeccionada por los miembros del Comité de Seguridad y Prevención de Lesiones no Intencionadas de la Asociación Española de Pediatría (AEP) y por otros profesionales.
Presentada en el último congreso de la AEP, está dividida en capítulos en los que se tratan muchos aspectos, tales como la importancia de las lesiones en los niños, los accidentes más frecuentes, las consecuencias que tienen, la prevención de las lesiones y, en el caso de que se haya producido una lesión, las recomendaciones acerca de los primeros auxilios.
La guía está dirigida a los padres, porque la prevención de las lesiones infantiles no es posible sin la colaboración de las personas que están en el entorno de los niños, tanto padres, como abuelos, cuidadores y personal de centros infantiles. Es decir, cualquier persona que pasa tiempo con el niño debe tener las habilidades y conocimientos para garantizar su seguridad y saberle atender en caso de producirse la lesión.
Desde EnFamilia animamos a su lectura y difusión, con la esperanza de que contribuya a prevenir y así disminuir las consecuencias de las lesiones no intencionadas.
