Es el llamado Infarto de ácido úrico del recién nacido. El color anaranjado se debe a la excreción de cristales de urato amorfo en la orina. Ocurre en los primeros días de vida.
Esta excreción de sales de ácido úrico en forma de cristales puede ser debida a que los niños en los primeros días de vida orinan mucho en relación a la cantidad de líquidos que toman, provocando una cierta deshidratación y por tanto la orina se concentra.
También se ha relacionado con la toma del calostro, o primera leche materna, que produce una orina más ácida que favorece la producción de estos cristales en la orina.
Es importante no alarmarse, estar tranquilos y continuar dando el pecho con regularidad. Los cristales en la orina suelen desaparecer en cuanto el niño empieza a tomar vólumenes mayores de leche.
No. Solamente si el bebé tiene otros síntomas, parece que no está comiendo suficiente, rechaza las tomas o si esta situación se mantiene más allá de una semana, se debería consultar con el pediatra para su valoración.