

Se trata de una erupción frecuente en la piel causada por un hongo (Malassezia) que vive habitualmente en nuestra piel. Puede aparecer a cualquier edad, pero es más frecuente en la adolescencia o en los adultos jóvenes.
Las áreas afectadas tienen unas manchas redondeadas rojas, marronáceas o más blancas. Las lesiones son secas y escamosas, y pueden ser planas o ligeramente elevadas. No suele aprecer ningún síntoma general salvo en ocasiones ligero picor.
No son contagiosas.
Aparece generalmente en la zona alta de la espalda y en el escote (zonas con más grasa). Se trata de un hongo habitual en la piel que, en condiciones de calor y humedad, crece. Suelen apreciarse más en el verano al impedir el hongo broncearse la zona afectada
El diagnóstico es clínico, normalmente no se necesita ninguna prueba complementaria, aunque en ocasiones puede ser necesario tomar una muestra.
Se trata con un antifúngico tópico en crema o en gel y en ocasiones se precisa administrar el tratamiento por vía oral.
Es importante saber que la piel puede tardar meses en recuperar su aspecto normal.
Puede recidivar y en ese caso su pediatra o dermatólogo le indicará realizar un tratamiento específico. Para evitar las recidivas se debe evitar humedad en la zona, que promueve la proliferación del hongo.