Edades y etapas
Bebé prematuro: desarrollo neurológico
Los bebés prematuros pueden tardar algo más en alcanzar las metas del desarrollo, comparados con los que nacen a su tiempo
Para valorar si el bebé ha alcanzado un desarrollo neurológico normal hay que tener en cuenta la edad corregida, es decir, la edad que tendría si hubiera nacido a las 40 semanas de embarazo (fecha probable de parto). Además, los bebés prematuros pueden tardar algo más en alcanzar las metas del desarrollo, comparados con los bebés que nacen a su tiempo.
¿Qué se espera de mi bebé según su edad corregida?
A los 2 meses puede girar la cabeza al escuchar ruidos y seguir el movimiento de los objetos con los ojos y sonreír. Reconoce a su madre o a la persona que lo cuida. Llora para que le atiendan y se calma al escuchar la voz de los padres.
A los 4 meses puede alcanzar objetos, llevarse las manos a la boca, reír y comenzar a relacionarse con sus padres y otras personas.
Al cumplir los 6 meses comienza a voltearse y a mantenerse sentado con apoyo. Puede agitar objetos, estirar los brazos para cogerlos con ambas manos y pasárselos de una mano a otra. Responde a su nombre y reacciona de forma diferente con los extraños que con sus padres.
A los 9 meses se mantiene sentado sin apoyo, gatea y puede caminar cuando se le sostiene con las manos. Imita sonidos y es capaz de decir palabras simples como mamá o papá. Puede levantar y sostener objetos.
Al cumplir los 12 meses puede comenzar a dar pasos solo, aunque a veces lo logra a los 15 meses. Ayuda a quitarse la ropa y juega con otros niños. Dice al menos dos palabras, además de mamá y papá, y reconoce su nombre e imita palabras familiares. Disfruta con el juego, muestra afecto y abraza.
A los 18 meses sube escaleras sujetándose con una sola mano. Construye torres de 3-4 bloques. Puede señalar tres partes del cuerpo, obedece órdenes sencillas, conoce y puede nombrar de 2 a 5 objetos corrientes. Utiliza diez palabras o más, incluidos los nombres propios, combina dos palabras diferentes (“no está” o “quiero galleta”).
En torno a los 24 meses puede apilar 6 bloques y pasar, una a una, las hojas de un libro. Identifica un círculo, un cuadrado y un triángulo. Sabe el uso de muchos objetos. Utiliza frases de dos palabras, comprende las preguntas y órdenes sencillas y puede indicar que tiene hambre o sed.
¿Cuándo consultar al pediatra por motivos relacionados con la adquisición de habilidades?
- Si a los 3 meses de edad corregida no sigue con los ojos la cara de personas u objetos. Si no emite sonidos, ni sonríe fácil y espontáneamente. Si no sostiene la cabeza.
- Si a los 6 meses de edad corregida se le ve apático o muy inquieto de forma constante. Si se relaciona poco, ni siquiera con su madre. Si no agarra los objetos y mantiene las manos cerradas.
- Si a los 9 meses de edad corregida no pasa objetos de una mano a otra. Si no se voltea ni se mantiene sentado. Si no responde a su nombre ni balbucea. Si parece no reconocer a sus cuidadores.
- Si a los 12 meses de edad corregida no se mantiene sentado sin apoyo, ni utiliza el pulgar y el índice para coger objetos pequeños, como por ejemplo trozos de comida. Si no pronuncia palabras simples (mamá, papá, tatá), ni imita gestos o no responde a juegos sencillos, como jugar a dar palmadas.
- Si a los 18 meses de edad corregida no camina sin ayuda o lo hace de puntillas de forma constante. Si no señala con el dedo índice, no imita sonidos ni pronuncia ninguna palabra comprensible. Si no puede construir una torre con bloques. Si no comprende órdenes sencillas.
- Si a los 24 meses de edad corregida no identifica objetos básicos o no inicia por sí mismo el juego. Si se cae o tropieza mucho más que otros niños de su misma edad. Si no es capaz de completar un rompecabezas o un juego sencillo de formas geométricas. Si no cumple órdenes sencillas como “dame”. Si no es capaz de nombrar las partes básicas del cuerpo o no reconoce a los miembros de su familia.
¿Qué recomendaciones generales pueden ser útiles?
Es recomendable realizar método canguro. El contacto físico es muy beneficioso para el desarrollo físico y cerebral.
Los padres de los bebés que nacieron muy prematuros pueden ayudar al desarrollo neurológico de sus hijos dedicándoles tiempo para jugar con objetos, adoptando distintas posturas, boca abajo, sentados con apoyo y de pie con sujeción de las manos. También se sabe que hablarles mucho, aun antes de que comprendan lo que escuchan, aumenta el desarrollo intelectual. Es muy bueno contarles cuentos antes de dormir desde muy pequeños. Observar la evolución de sus hijos y compartir sus preocupaciones con el pediatra si cree que, según la edad corregida, no alcanza el desarrollo de los demás niños a su edad.
Los bebés más prematuros, nacidos antes de las 32 semanas de edad gestacional o con menos de 1500g de peso al nacer deben ser emitidos a Atención Temprana para valoración, estimulación y tratamiento.
Se recomienda realizar una evaluación motora por Neurología al menos 2 veces en el primer año de vida y test seriados para evaluar el desarrollo.