Edades y etapas
Masturbación en preescolares
La masturbación es una práctica normal en niños y niñas a partir de los 2 años, aunque pueda resultar "incómoda" a veces para los adultos
La masturbación es la autoestimulación de los genitales por placer. Es algo más que la inspección normal de los genitales que realizan casi todos los niños en el baño, que puede comenzar desde que el niño es capaz de agarrar objetos (hacia los 5 o 6 meses) y que es muy frecuente hacia los 2 años de edad. La masturbación, que es una actividad normal y frecuente en los niños, puede practicarse a cualquier edad, pero es muy rara antes de los 6 meses. Los más pequeños frotan sus muslos uno contra otro, con movimientos rítmicos de las caderas cuando está boca arriba o moviéndose sobre las manos o las rodillas cuando están boca abajo. Un poco más tarde pueden aprender a frotarse contra algún muñeco, el brazo de un sillón, etc. La manipulación rítmica de los genitales con la mano no se suele producir antes de los 2 años y medio. La frecuencia con que un niño se masturba puede variar, por ejemplo, entre varias veces al día o una vez a la semana, pero es más frecuente cuando el niño se va a dormir, está aburrido o viendo la televisión o si está sometido a algún tipo de estrés.
En cualquier caso, durante la masturbación, el niño puede parecer ensimismado, acalorado y sudoroso, con movimientos rítmicos de la cabeza o extremidades y al concluir puede quedar agotado, lo que en algún caso ha llevado al error de diagnosticar el episodio de ataque epiléptico.
¿Cuál es la causa?
La masturbación esporádica en niños preescolares es una conducta normal. Hasta un tercio de los niños de esta edad descubren la masturbación mientras exploran su cuerpo. La mayoría continúan masturbándose simplemente porque les gusta, aunque algunos pueden hacerlo de forma más frecuente si tienen algún problema o si se les castiga o presiona para que dejen de hacerlo.
No hay causas médicas. La irritación del área genital puede producir dolor e inflamación, pero es más probable que sean consecuencia y no causa de la masturbación.
¿Cuándo dejará de hacerlo?
Una vez que el niño ha descubierto que la masturbación le proporciona placer, no hay que esperar que deje de hacerlo de forma inmediata. Además, si no se le reprende lo hará abiertamente. Hacia los 5 a 6 años es muy probable que disminuya su frecuencia o, por lo menos, que lo haga de forma más reservada. Más tarde, en la adolescencia, la masturbación es casi universal, en relación con los cambios hormonales y el inicio del deseo sexual.
¿Qué le pasará si se masturba a menudo?
Aparte del placer que le proporcione al niño, nada. No le provocará ningún daño corporal o psicológico. Que el niño se masturbe no va a alterar su orientación sexual, no va a hacer que sea promiscuo y, por supuesto, no tiene ninguna relación con la epilepsia.
Como padre, ¿qué puedo hacer?
Si consideramos que casi todos los niños más tarde o más temprano se masturban y que lo hacen porque realmente les gusta, no habría que hacer nada, salvo dejar al niño tranquilo. Conviene tener claro que aunque los padres lo intenten, no van a conseguir que deje de hacerlo de forma inmediata. Así que habrá que aceptarlo como lo que es: una situación normal. Las reprimendas, castigos, etc. pueden tener un efecto negativo, porque pueden reforzar esa conducta.
Si cree que la masturbación puede tener relación con el aburrimiento, puede intentar mantenerle ocupado con actividades que le atraigan. Probablemente, habrá que ser aún más tolerante cuando la masturbación se produzca en los momentos de descanso: en la siesta o al irse a dormir por la noche.
Enséñele a que no lo haga delante de otras personas, explíquele que es un acto a realizar exclusivamente en el ámbito privado y no público. Si lo hace en sitios públicos, como el colegio, conviene comentárselo a los profesores para que procuren mantener su atención en la clase y eviten regañarle en público.
¿Cuándo debo acudir al pediatra?
En contadas ocasiones, la masturbación estará relacionada con situaciones de estrés del niño o, incluso, abusos sexuales por parte de adultos. En esos casos, no dude en consultar a su pediatra o enfermera.
Sin embargo, en la inmensa mayoría de los casos la masturbación en los niños pequeños no es más que una conducta normal que no debe interpretarse como un problema.
Artículo compartido con la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria.