Temas de salud
Enuresis (mojar la cama)
Unos niños dejan de orinarse en la cama antes, otros demasiado tarde y algunos nunca lo lograrán sin ayuda. Suele haber una predisposición familiar
Suele haber una predisposición familiar (antecedentes) que hace que se contemple como algo más o menos normal y pasajero. Sin embargo, esta situación genera problemas emocionales o complejos en los niños, que pueden y deben evitarse tratando la enuresis sin esperar a que sucedan.
¿Qué es la enuresis?
Es el escape de orina mientras el niño está durmiendo, a partir de los 5 años. Habitualmente el control durante el sueño se consigue entre los 2 y 4 años.
La enuresis se llama primaria si nunca ha dejado de mojar la cama al menos 6 meses seguidos. Si consigue estar seco (más de 6 meses) y vuelve a mojar, se llama enuresis secundaria.
¿Con que frecuencia ocurre?
La enuresis es muy frecuente. A los 5 años, 1 de cada 6 niños moja la cama. Esta frecuencia va disminuyendo con la edad, pero a los 9-10 años todavía mojan un 2-3% de los niños y el problema puede prolongarse hasta la edad adulta, en el 1-3% de los casos, si no reciben tratamiento.
¿Por qué pasa?
La mayoría de los casos son enuresis primarias y no se sabe la causa.
Se ha relacionado con:
- Herencia: muchas veces a algún familiar también le pasó.
- Género: es más frecuente en los niños que en las niñas.
- Mayor producción de orina por varios motivos.
- No ser capaces de despertarse para orinar.
- Estreñimiento crónico.
Las causas más frecuentes de enuresis secundaria son los problemas psicológicos por estrés, conflictos familiares o escolares, celos por el nacimiento de un hermano, etc. Aunque otras enfermedades como por ejemplo la diabetes, también pueden producirla.
¿Cuándo se debe consultar al pediatra?
A partir de los 5 años si hay preocupación por la enuresis en el niño o en la familia o temor por sus repercusiones psicológicas. No espere y consulte siempre que el niño moje la cama casi todas las noches o si es mayor de 9 años, porque la probabilidad de curar sin tratamiento es baja en estos casos. Otros motivos que aconsejan la consulta médica son:
- La enuresis aparece después de no haberse orinado al menos durante 6 meses seguidos.
- Cambios en la cantidad o en el número de veces que orina al día.
- Si asocia estreñimiento o encopresis (se hace “caca” en la ropa).
- Dolor, escozor o dificultad para orinar. Orina turbia, maloliente o con sangre.
- Chorro fino al orinar o escapes de gotas de orina después de finalizar.
- Escapes de orina durante el día, excepto si la causa es que el niño no va a orinar porque está “atrapado” por el juego, televisión, etc.
- Si se asocia con un cambio repentino de la personalidad o el estado de ánimo.
¿Qué suele hacer el pediatra en la consulta?
- Hará preguntas sobre el problema y la salud de niño.
- Puede que le explore el abdomen, los genitales y la espalda. La exploración del niño es normal en la enuresis primaria.
- También puede solicitar un registro de la cantidad y veces que orina al día, durante unos días, para estimar cuánta orina cabe en su vejiga. Esto es el diario miccional.
- No suele necesitar otras pruebas (análisis, radiografía, ecografías…) antes de iniciar el tratamiento, salvo que sospeche alguna enfermedad. En este caso, probablemente lo derive a otro especialista.
¿Cómo puedo ayudar al niño?
No debe reñir ni castigar al niño que moja la cama. No lo hace porque quiere. Seguramente a él también le molesta, aunque no lo diga.
Se le puede ayudar con estas medidas:
- Evitar que se sienta culpable, la enuresis ocurre en muchos niños y no es voluntaria.
- Regla familiar: no burlarse del niño. Su autoestima está en juego.
- Vigilar que orine antes de acostarse y que no beba líquidos justo antes de dormir o por la noche. Las bebidas con cafeína se deben evitar siempre.
- Motive al niño con un calendario de noches secas y mojadas, mediante dibujos o pegatinas y felicítelo ante los mínimos avances hacia la sequedad: despertarse seco de la siesta o alguna noche, despertarse para orinar, intentar no ponerse pañal para ser mayor…. Si ve que no mejora, no insista con el calendario porque se frustrará.
- Se aconseja retirar el pañal para dormir cuando comience a estar seco o inicie el tratamiento de la enuresis que le recomiende su pediatra. Puede poner un protector de colchón o, más cómodo, absorbentes desechables, con o sin alas, sobre la sábana.
- Deje que su hijo le ayude o cambie la ropa mojada, pero sin que lo sienta como un castigo.
- No ayuda a curar la enuresis levantar al niño a orinar por la noche. Suele estar dormido y le acostumbra a orinar sin despertarse.
- Tampoco ayuda a solucionar la enuresis entrenar al niño durante el día a retener la orina, cada vez más tiempo, cuando siente ganas de hacer pis.
- Es perjudicial que “corte el chorro” mientras esté orinando. No se lo aconseje, ya que puede alterar la función de la vejiga.
¿Cuándo se debe iniciar un tratamiento?
Muchos padres no saben que hay tratamientos eficaces y consultan demasiado tarde esperando que el problema se resuelva solo, quizá porque a ellos también les pasó.
El tratamiento se puede iniciar a partir de los 5 años, pero varía en función del niño y de su familia.
Los niños pequeños que mojan pocas noches por semana son los que más probabilidad tienen de curar sin ayuda médica. En cambio, los que mojan todas o casi todas las noches y los mayores de 9 años y adolescentes, seguramente seguirán mojando la cama si no se tratan. No espere a que esto pase.
¿Qué tratamientos se pueden utilizar?
Hay dos tratamientos eficaces para solucionar o controlar la enuresis:
- Alarma de enuresis: es un tratamiento que enseña a responder a las sensaciones de la vejiga llena mientras duerme. Necesita la ayuda de un profesional y el uso de un dispositivo que le despertará al emitir un sonido, luz o vibración con las primeras gotas de orina. Bien realizado, es el tratamiento más eficaz. Exige motivación, esfuerzo y colaboración del niño y la familia.
- Desmopresina: es un medicamento que disminuye la producción de orina por la noche. Es ideal para los campamentos o situaciones esporádicas y una alternativa a la alarma cuando no está indicada o no se puede utilizar. Son frecuentes las recaídas al suspenderlo. Tiene riesgos de intoxicación si bebe líquidos. Debe evitarlos desde 1 hora antes hasta 8 horas después de su toma. Síntomas como vómitos, diarrea, dolor de cabeza o adormecimiento recomiendan dejar el tratamiento y consultar.
Los dos tratamientos requieren constancia y supervisión por un profesional. Habitualmente se necesitan varios meses para solucionar la enuresis. Puede haber recaídas que aconsejen nuevos ciclos o cambios de tratamiento, pero la mayoría de los casos se curan.